La piscina cubierta municipal de Baza reabrió sus puertas el pasado viernes (día 12 de febrero) manteniendo el protocolo especial de seguridad y de prevención frente al coronavirus que establecen las autoridades sanitarias, además de mantener la limpieza y desinfección de todas las instalaciones, así como la organización de espacios de uso compartido.
Con un aforo limitado al 40%, la piscina cubierta ha retomado su actividad que, además de nado libre, incluye cursos de natación a menores y la Sala de la Salud con actividades dirigidas de pilates, zumba, escuela de espalda y gimnasia de mantenimiento, todas ellas en horario de 15h a 18h.
El habitual uso de productos desinfectantes, así como un nivel de cloro mayor de 1 mg/l el evita la contaminación microbiana, además de eliminar cualquier germen que pueda entrar en contacto con el agua, convirtiendo las piscinas en un espacio libre de COVID.