El Ayuntamiento de Baza ha iniciado una actuación de tratamiento de humedades capilares en el palacio de Los Enríquez, un edificio emblemático de la ciudad que fue declarado Monumento Histórico Artístico en 1975. En concreto se ha programado actuar en las tres salas principales (Salas Nobles y Capitular) en planta baja que conforman la zona central de la crujía de orientación Sur/Norte y que permitían el acceso directo desde calle Carrera de Palacio hasta los jardines y estanque de las traseras propia del palacio.
Esta intervención completa una programación de tres actuaciones básicas para la apertura del Palacio a fin de que la ciudadanía lo conozca y valore como parte de ese patrimonio que conforma la identidad bastetana. Las otras dos han sido el acondicionamiento de los jardines y la instalación de una lona que recrea unos de los cenadores perdidos y que, al mismo tiempo, sirviera de protección ante las palomas.
Los servicios técnicos del área de Urbanismo han sido los responsables de la redacción del proyecto de esta intervención para el tratamiento de humedades con el apoyo externo de profesionales de la restauración y con la supervisión de la delegación de Cultura. Cuenta, por supuesto, con todos los permisos precisos para llevarse a cabo y tiene una inversión prevista aproximada de 10.000 euros.
El alcalde de Baza, Manolo Gavilán, y la concejala de Urbanismo, Gemma Pérez, han realizado esta mañana una visita a estos trabajos que han arrancado hoy con una duración aproximada de cuatro semanas. “Se trata de un importante primer paso tras la adquisición del Palacio para avanzar hacia ese objetivo de abrirlo al público con visitas controladas y, al mismo tiempo, mantenerlo como tema prioritario ante todas las administraciones para seguir reclamando el siguiente paso necesario para su recuperación integral: la redacción del proyecto”, ha detallado el alcalde.
Tanto alcalde como concejala destacan la importancia de la puesta en valor de un bien patrimonial de esta envergadura. “Una recuperación que no solo radica en la recuperación material, sino que contempla otras acciones paralelas para su puesta en valor y fomento de su conocimiento entre la ciudadanía para la toma de conciencia de su valor”. Algo que se pretende conseguir una vez concluidas estas labores de mantenimiento y conservación “que, por un lado, contribuyan a detener el deterioro del bien y, por otro, nos den unas condiciones mínimas para poder llevar a cabo esas acciones de dinamización y difusión”. “Es nuestro deber y obligación evitar que se borre del imaginario colectivo. Para ello, hemos planteado una serie de visitas guiadas con aforo reducido y solamente por aquellas zonas que se encuentran accesibles una vez acabadas estas actuaciones”, concluyen.
El Palacio de los Enríquez fue mandado construir por el matrimonio formado por don Enrique Enríquez, tío carnal del rey Fernando el Católico, y su esposa doña María de Luna en 1506, concebido como villa de campo extramuros de la antigua ciudad medieval, y constituye un ejemplo único en Andalucía, siguiendo modelos italianos contemporáneos. Presenta varias fases constructivas que se desarrollan fundamentalmente a lo largo de la primera mitad del siglo XVI y otras transformaciones del siglo XIX/XX.