Evidentemente, ese mes de cierre no se cobrará a los abonados
La piscina municipal cubierta de Baza va a estar cerrada entre el 15 de agosto y el 15 de septiembre, cuatro semanas en las que se aprovechará para llevar a cabo una serie de actuaciones de mejora en el edificio que acoge este servicio, así como labores de mantenimiento que requiere la infraestructura de esta piscina que utilizan a diario decenas de vecinos de todas las edades. De hecho, ya se pueden ver en su exterior los andamios que permitirán, por ejemplo, cambiar los ventanales para que el inmueble sea más eficaz en el sostenimiento de sus condiciones de temperatura, gasto energético, etc. “La intención es que la piscina cubierta gane en sostenibilidad, es decir, que el edificio nos permita mantener sus características con la mayor eficiencia posible y proceder a las obligadas labores de mantenimiento de la maquinaria, conductos, etc. que contiene esta instalación deportiva municipal”, ha indicado el concejal de Deportes, José Antonio Valdivieso, que junto al alcalde, Pedro J. Ramos, han visitado el inicio de los trabajos días antes del cierre de la piscina.
Evidentemente, el mes que permanecerá cerrada la piscina no se va a cobrar a los abonados. Aunque el cargo correspondiente al mes de agosto ya se ha efectuado, el del mes de septiembre se anulará, de manera que los últimos quince días de agosto quedarán compensados con la última quincena de septiembre. Las previsiones son que la piscina vuelva a estar operativa el martes 16 de septiembre. En todo caso, se informará convenientemente de los retrasos si los hubiera.