Varias decenas de personas participaron en las visitas desarrolladas el sábado 15 de junio en el monumento
El Palacio de los Enríquez guarda bajo sus paredes y suelos numerosos secretos que poco a poco van saliendo a la luz. Es importante conocerlos todos para que la rehabilitación de este monumento se haga de la mejor manera posible. Con el fin de hacer públicos algunos de esos secretos y de explicar a la población los trabajos de investigación que se han venido realizando en el entorno del Palacio, previos a ese proyecto de restauración, el pasado 15 de junio, sábado, y dentro de las Jornadas Europeas de Arqueología 2024, el Ayuntamiento preparó una serie de visitas en las que participaron varias decenas de personas. Entre ellos estuvieron presentes los concejales de Patrimonio, Mª Carmen López, de Cultura, José Gabriel López, y de Gobernación, Mª Carmen Sánchez, así como otros miembros de la corporación municipal.
Durante esas visitas se han explicado los resultados obtenidos en los trabajos de prospección geofísica que se llevaron a cabo durante el mes de octubre de 2023 en buena parte de los jardines y en algunos de los espacios interiores del conjunto del palacio, con el objetivo de detectar la posible presencia de estructuras históricas soterradas. La visita ha sido posible gracias al Ayuntamiento de Baza y ha corrido a cargo de los miembros del Laboratorio de Arqueología y Arquitectura de la Ciudad de la Escuela de Estudios Árabes del CSIC: Luis J. García Pulido (Dr. Arquitecto, Científico Titular), Sara Peñalver Martín
(Arquitecta, Técnica de Investigación) y Kerstin Elert (Dra. en Restauración, Contratada Doctoral en el Programa Ramón y Cajal). También se ha contado con la presencia de Lorenzo Sánchez Quirante (Arqueólogo y Director del Museo Arqueológico de Baza hasta 2023), así como con los investigadores del Instituto Andaluz de Geofísica y Prevención de Desastres Sísmicos de la Universidad de Granada que llevaron a cabo la exploración geofísica: José Antonio Peña Ruano (Dr. en Ciencias Geológicas), Mª. Teresa Teixidó Ullod (Dra. en Ciencias Físicas) y Carlos José Araque Pérez (Ingeniero Geofísico). En el trabajo de investigación y documentación participan miembros de la Unidad Asociada Patrimonio Cultural Árabe e Islámico de la UGR al CSIC por la EEA-ILC.
Estos trabajos constituyen el punto de partida de una serie de actividades planeadas para obtener el mayor grado de conocimiento histórico, arqueológico, arquitectónico y artístico, todo ello orientado a la restauración y recuperación integral de este importante monumento de la ciudad de Baza.
La visita, organizada en tres partes, ha permitido profundizar en la historia del palacio renacentista construido tras la conquista de Baza en 1489 y conocer de primera mano los resultados de la prospección geofísica desarrollada durante el pasado otoño en buena parte de los jardines y en algunos de los espacios interiores del conjunto del palacio. Estos trabajos han permitido detectar numerosos restos ocultos bajo los niveles del suelo actual del palacio y, muy especialmente, en sus jardines, donde se ha desarrollado una parte del recorrido. A falta de realizar trabajos de excavación arqueológica que permitan documentar, analizar y datarlos, estos vestigios podrían corresponder en algunos casos a los primeros momentos de construcción del palacio renacentista o a la desaparición de algunos elementos que se sabe que tuvo. Otras estructuras ocultas podrían adscribirse a momentos de ocupación anteriores al siglo XVI, cuando la ciudad de Baza era madīnat Basṭa y en sus alrededores pudo haber existido una almunia o gran finca asociada a las élites, en cuyo núcleo principal se habría implantado el Palacio de los Enríquez.
Durante la visita se ha podido transitar por los espacios arquitectónicos mejor conservados del edificio y se ha prestado especial atención a varias zonas del jardín, donde se han detectado numerosas estructuras ocultas bajo la superficie del terreno. Por una parte, en el área que se extiende entre la fachada sur del palacio y la Iglesia de San Jerónimo, donde se ha detectado una gran densidad de restos a poca profundidad. Por otra, en desarrollo del jardín hacia levante, en la que se encuentra la alberca que se extiende a los pies de la fachada este del palacio, hoy oculta bajo el nivel del jardín pero que estuvo en uso hasta mediados del siglo XX. En esta zona se ha podido presenciar in situ el método desarrollado por el equipo del Instituto Andaluz de Geofísica de la UGR para obtener datos de elementos ocultos bajo el subsuelo mediante técnicas de prospección geofísica.
A su vez, en el interior del palacio se ha instalado para la visita un “pequeño laboratorio de campo” para mostrar lo importante que es analizar los materiales utilizados en la construcción de un edificio histórico, no solo para conocer el deterioro o los daños que pueden sufrir, sino especialmente para planificar intervenciones de restauración eficaces y respetuosas para su conservación.