El Centro de Interpretación de la Cultura Íbera, más conocido como CICI, ubicado en la antigua iglesia de San Jerónimo, ha ampliado y mejorado su oferta expositiva con la llegada de la muestra “50 miradas a una Dama”. Tras su rehabilitación hace años, desde 2022 este recinto municipal acoge la exposición “Íberos. Nuestra civilización antes de Roma”, entregada a Baza por el Ayuntamiento de Jaén, en la que se pueden ver varias reproducciones a escala de escenas cotidianas y de diversos referentes íberos. A todo este material se suman ahora los distintos elementos que conforman la exposición con la que concluyeron las actividades del cincuenta aniversario del descubrimiento de la Dama de Baza y que durante varios meses permaneció en el centro sociocultural de Santo Domingo.
Para instalar la original muestra sobre nuestra gran embajadora se ha aprovechado el espacio de la antigua sacristía del templo, a la que se accede por una de las capillas laterales, de manera que se incorpora perfectamente al habitual recorrido que se efectúa en el centro interpretativo. En esta nueva dependencia se han recolocado gran parte de los materiales que conformaban la exposición en Santo Domingo, tanto los paneles explicativos como los elementos de mayor valor, entre los que se encuentran el telar íbero y, por supuesto, la réplica de la Dama sobre la que se han colocado las ropas y las joyas que debió vestir hace veinticuatro siglos la diosa que representa la escultura. “Estamos convencidos de que “50 miradas a una Dama” va a servir para dar más fuerza e interés a este Centro de Interpretación de la Cultura Íbera, una nueva razón para revisitarlo y un elemento más para aquellos que quieren profundizar en el conocimiento de la sociedad que creó Basti y que vivió en nuestra tierra hace tantos siglos ya”, ha remarcado el concejal de Cultura, José Gabriel López.
El Centro de Interpretación de la Cultura Íbera, en el que se puede visitar también “50 miradas a una Dama”, permanece abierto de lunes a viernes y de 11:00 a 14:00 horas. La entrada es totalmente gratuita para contemplar todo el material que contiene. De cara a los grupos que quieran disfrutarlo fuera de ese horario, tanto a nivel turístico como de cara a colegios y entidades públicas, deberán ponerse en contacto con la Oficina de Turismo de Baza para establecer horario y día para la visita. La concejalía de Cultura y Turismo está estudiando la posibilidad de ampliar los días y las horas de apertura, que dependerá de la afluencia y del reclamo que este recinto vaya recogiendo.
“50 miradas a una Dama” pretender ser, sobre todo, una exposición didáctica. Sus responsables quieren que, cuando salgamos de ella, sepamos más y mejor cuáles son los elementos que conforman la figura de la Dama, cómo se hicieron, quiénes estuvieron detrás de sus detalles, de su ropa, de sus joyas, de sus botines, cómo se hicieron las telas que la visten, por qué son de ese color y no de otro, en definitiva, muchas miradas, muchos puntos de vista, sobre una misma escultura. Pocos detalles nos quedarán por conocer de nuestra Dama de Baza. A lo largo de varios paneles se explican cuestiones relacionadas con el descubrimiento de la Dama, en julio de 1971, con el tratamiento que le dieron los medios de comunicación al hallazgo, se habla de la promoción turística y cultural que ha supuesto para este entorno geográfico, etc. La exposición cuenta también con cuatro grandes plasmas donde se pueden contemplar otros contenidos alusivos. Más allá de estos elementos informativos, “50 miradas a una Dama” nos ofrece tres reclamos muy interesantes. Se trata de tres réplicas que complementan a la perfección el sentido y el objetivo de la exposición. La más llamativa es una reproducción a tamaño natural de la Dama de Baza pero humanizada. Los estudios científicos han llegado a la conclusión de que la escultura que todos conocemos podría ser una réplica en piedra de algo real, incluso de alguna persona real que sirviera de modelo… Pues bien, esta exposición nos ofrece esa modelo. Para ello se ha construido una forma humana en plástico sobre la que se han colocado todos los elementos que lleva encima la Dama. Se ha maquillado con los mismos colores y con las mismas sustancias, se ha vestido con las mismas telas que se han tintado con los mismos colores que utilizaron los íberos, se le han colocado las mismas joyas que lleva la Dama, creadas a propósito en el mismo material, se le han colocado incluso los anillos en sus dedos, se han confeccionado los botines que debió llevar la modelo que sirvió para hacer la escultura, se ha hecho en madera el trono, e incluso se ha trabajado en piedra la base. Hasta el cojín donde posa sus pies se ha hecho a medida y con la misma tela que debió tener el de hace veinticuatro siglos. La apariencia de esta Dama de Baza no es la que todos tenemos en la memoria, es la original, la que sirvió de base para los escultores que la reprodujeron en piedra, porque, según los últimos estudios, fueron dos personas la que trabajaron en ella. Junto a esta réplica, que es el punto central de la exposición, se podrán contemplar otras dos. Por un lado se han reproducido las piezas que conforman el ajuar que la acompañaba en la tumba 155 del Cerro Santuario: vasijas, ánforas, urnas, tapaderas, que podremos ver por primera vez con sus dibujos y en sus colores originales, como fueron creadas. Y por otro lado, podremos ver y tocar la reproducción de un telar íbero con el que, incluso, se podría tejer. Es tal su precisión, sus detalles y su veracidad histórica que, a diferencia de los que existen en otros lugares del mundo, en este se podría empezar a trabajar en cualquier momento, por ejemplo, en la confección de las telas que porta la Dama de Baza.
