Durante 2019 cinco personas han ocupado una plaza de residencia mediante el sistema de “dependencia municipal” hasta la concesión de una plaza concertada por la Junta
Durante 2019 cinco personas con un grado elevado de dependencia se han beneficiado de una plaza municipal en la residencia Braulia Ramos en periodos de entre un año y seis meses. Todas ellas son personas con una situación personal que les hace depender por completo de cuidadores y que necesitaban de forma urgente ingresar en una residencia, mientras se resolvía su Programa Individual de Atención (PIA).
Han sido tres mujeres y dos hombres, de entre 60 y 80 años, alguna de ellas con demencia y con dolencias que les impiden desarrollar su día a día de forma autónoma. A ello se suma que, por su situación económica, no podían acceder a una plaza privada de residencia hasta que se les asigne la concertada.
Según la ordenanza municipal que regula el sistema y que emula la fórmula empleada por la Junta, los mayores han aportado hasta un máximo del 75% de su pensión para cubrir su residencia y el resto ha sido aportado por la concesionaria del servicio en compensación por el canon de adjudicación.
Los cinco bastetanos han recibido atención gracias al sistema municipal de apoyo a las personas dependientes, por el que el ayuntamiento ofrece desde hace dos años plazas en la residencia municipal para reducir los plazos de acceso a una plaza concertada por la Junta de Andalucía y facilitar a los cuidadores la posibilidad de beneficiarse de hasta dos meses de residencia en concepto de ‘respiro familiar’.
La residencia municipal Braulia Ramos abrió sus puertas en 2016 con un total de 103 plazas y 20 de Unidad de Estancia Diurna, en dónde trabajan 62 personas. Está prevista la construcción de su ampliación durante este año con 81 nuevas plazas de residencia y 10 de estancia diurna, que precisará de una inversión de 3,4 millones de euros.